A new life cap.15

Narra Clara.
Después de que mi hermano me dejara más histérica de lo que ya estaba pude acabar con tranquilidad mis maletas. Por fin iría a pasar unas vacaciones con mi novio. Mi novio. Que bonitas sonaban aquellas palabras. La ciudad del amor nos esperaba aunque cualquier ciudad era la ciudad del amor si estaba junto a él. 
- ¿Estás lista? - Carlos entró por la puerta de mi habitación y me dio un beso. Por mucho que adorara pasar las vacaciones con mi familia siempre prefería pasarlas con mi chico.
- Todo listo, ¿y tú?  - no podía dejar de sonreír.
- Todas las maletas están en el coche - Carlos cogió mis maletas y lo ayudé a bajarlas. Mi padre nos llevaría al aeropuerto. - Ese collar es muy bonito ¿quién te lo habrá regalado? - dijo con tono irónico.
- No sé, mi amante - dije bromeando - Tonto, este collar es mi mayor tesoro - me acordé de la noche que me lo regaló. Llevábamos juntos dos meses y él se presentó a mi casa de Madrid diciéndome que era lo mejor que le podía haber pasado y que jamás quería perderme. 
- ¿Sigues loca por Justin? - dijo al darse cuenta de la pulsera. Era una de las mayores beliebers que existía.

- Es algo que no se puede evitar, es un gran sentimiento - le enseñé mi iPhone y flipó con mi nueva funda pero al momento se echó a reír.

- Por eso te quiero tanto - me dio un beso hasta que apareció mi padre por detrás y carraspeó.

- Vamos o perderéis el vuelo - mi padre no estaba muy convencido con esta relación, según él no duraríamos mucho y este año sería un año echado a perder. Pero no me importaba lo que él pensaba. Ya era mayor y podía hacer mi vida. 

Narra Niall.

Harry y yo llegamos a casa de Zayn a las 8 de la mañana, todos se habían ido temprano menos nosotros. Entré a la habitación y la cama de _____ estaba echa y ella no estaba. A los pocos minutos de haberme echado en mi cama, Harry apareció por la puerta y se tiró en la cama de _____ boca abajo.

- Están los dos en la habitación de Zayn y como solo hay una cama creo que de ahora en adelante dormiré aquí - dijo Harry sin apenas mirarme.

- ¿Eso significa que han vuelto? - Harry asintió - ¿Y tú como estás? - pregunté preocupado por el estado de ánimo de Harry.

- Estoy bien, se merecen estar juntos y a mi la chica de anoche me impactó. Creo que todo lo que sentía por _____ ha desaparecido. - me sentí aliviado por la respuesta de Harry y pude quedarme dormido tranquilo aunque Harry al minuto de hablar conmigo ya estaba roncando.

Narras tú.

Me desperté perezosa hasta que me dí cuenta que estaba con la cabeza apoyada sobre el pecho de Zayn. Era muy placentero despertar a su lado. Le dí un beso en la mejilla y busqué mi ropa hasta que me dí cuenta que la tenía en mi habitación. Salí de puntillas de la habitación y vi a Harry durmiendo en mi cama. Por lo visto tendría que mudarme de habitación. Busqué algo de ropa para vestirme y me puse lo más cómodo que encontré. 

Mi color normal era el verde pero hoy iba a cambiar. Dejé la otra ropa esparcida por la habitación y bajé a desayunar. En la cocina estaba Liam preparando tortitas.

- Que bien huele - dije cerrando los ojos y oliendo aquellas tortitas. Saqué el zumo de naranja de la nevera y lo eché en dos vasos. Liam puso las tortitas encima de la mesa mientras yo sacaba los diferentes sabores de sirope. 

- Que aproveche - dijo Liam sonriendo. - Por ser los primeros, comemos tu y yo.

- Para los más madrugadores - le pasé su vaso con el zumo y me lo agradeció con una mirada. -¿ Danielle sigue durmiendo? 

- Sí, no quería despertarla - siguió comiendo - ¿Y Zayn? - empezó a reírse e iba a preguntarle como lo sabía  pero me contestó sin mas- Iba a preguntarle a Niall si quería desayunar y vi que Harry estaba durmiendo en tu cama y ya me lo pude imaginar - me sonrió - Ya era hora.

- ¿Qué quieres decir? - pregunté con la boca llena y Liam me fulminó con la mirada - Perdón.

- Pienso que ya habéis sufrido bastante los dos y con lo que os queréis  no os merecíais ese sufrimiento.

- ¿Desayunando sin mi? - Louis apareció por detrás bostezando pero aún así enérgico. 

- Ahí quedan más - dije señalando con el tenedor la pila de la cocina. Louis cogió el plato lleno y lo llenó con sirope de fresa mezclandolo con sirope de chocolate. Cogió una tortita y se la metió entera a la boca - Dios, que ricas están - habló con la boca llena y trocitos de las tortitas salían disparadas de su boca. Liam le dio una patada por debajo de la mesa y Louis hizo un ruido extraño.

- No se habla con la boca abierta. Aquí eso es ley y hay que cumplirla - dije riéndome.

- Somos jóvenes  y las reglas hay que romperlas y más aún si son de Liam - Louis no pudo parar de reírse y yo hice lo mismo. 

- Hoy estáis muy revolucionados - Eleanor apareció por la puerta y le dio un beso a Louis en la frente. - ¿Quedan más tortitas?

- ¡No! - Louis cogió todo el plato de tortitas y salió corriendo por la puerta.

- ¡Boo bear! - Eleanor salió corriendo detrás suya. Liam y yo nos miramos curiosos y empezamos a reírnos. Acabé de desayunar, lavé mi plato y el de Liam y me fui a la habitación para despertar a Zayn. Me lo encontré en la misma posición de antes pero esta vez abrazaba la almohada. Me hacía mucha gracia su cara. Me senté a su lado en la cama y le dí un beso en la mejilla. Zayn abrió el ojo derecho, vio que era yo y me sonrió. Me cogió en brazos y me tiró en la cama. Se sentó encima mía y me dio un beso.

- Buenos días princesa - no paraba de sonreír y besarme. 

- Buenos días - lo abracé por el cuello y le di un beso largo, como solíamos darnos en los viejos tiempos - Voy a mancharte la sabana - me hice a un lado para no poner los pies con las botas en la cama pero Zayn se incorporó antes que yo y me quitó las botas.

- Ya no puedes manchar nada - me abrazó a él y me dio un beso en el cuello. - Lo primero que haré, después de desayunar, es ayudarte a mover tus cosas aquí.

A new life Cap.14

Narras tú.
Mi miedo a los aviones cada vez era menor y si estaba acompañada era como si no existiera, lo peor de todo eran las sacudidas. Siempre dejaba que Niall se pusiera a la ventana y nunca aceptaba un billete con asiento al lado de la ventana, era insoportable. No conté el tiempo pero se me hizo eterno. Llegamos a Bradford donde Zayn nos estaba esperando, nos ayudó con las maletas y sinceramente se veía más feliz que la última vez que lo había visto.
- ¿Tu te quedarás con nosotros? - le pregunté a Zayn desde el asiento de atrás. Para no pelearnos Niall y yo decidimos sentarnos los dos en la parte trasera. 
- Claro, no pienso dejar que destrocéis mi casa - dijo entre risas. Niall y Zayn entablaron una conversación y yo desconecté. - _____ ya hemos llegado - por lo visto me había quedado dormida y Zayn me había despertado. Salí del coche y vi que ya habían sacado todas las maletas. Entré en la casa y no había nadie, eramos los primeros en llegar. Ya tenía una duda existencial pero antes de poder planteársela a Zayn ya se la había hecho Niall.
- ¿Dónde dormiremos? - esa era la duda. 
- Por ser los primeros en llegar podréis elegir la habitación que queráis y dormiréis los dos juntos. Según vayan llegando se elegirán habitaciones. Louis con Eleanor, Liam con Danielle, y Harry conmigo. - contestó Zayn. Sería divertido verlos a los dos dormir juntos. Me reír disimuladamente y subí arriba en busca de alguna habitación. 
- ¡Esta me gusta! - me gritó Niall y fui a verla. Era muy espaciosa, había dos camas y nos cabrían todas las cosas.
- Nos quedamos esta - dije decidida. Niall movió todas las maletas del piso de abajo a la habitación y por último sacamos todas las cosas de las maletas y las ordenamos. Poco a poco fueron llegando los demás. Serían unas vacaciones inolvidables. Niall entró a la ducha mientras yo seguía sacando mis cosas, él tenía pocas cosas en relación con las mías aunque también eran muchas. 
- ¿Te ayudo? - se ofreció Zayn.
- Te estaría agradecida - dije sonriendole  y empezó a ayudarme con toda la ropa. Tendría que decirle de alguna manera lo que había hecho, sabía que le costaría perdonarme. - Zayn - dije para captar su atención - ¿Te acuerdas del collar que me regalaste? - él asintió - Lo adoro y es mi mayor tesoro pero el día que saqué las cosas del desván con mi madre para Navidad se me perdió y mi madre aún sigue buscándolo entre todos esos trastos - Zayn se quedó con la boca abierta incrédulo de lo que le había dicho.
- No me lo puedo creer - dijo aún sin poder creérselo - ¡Te lo regalé con todo amor y tú lo pierdes! - me gritó.
- No fue mi intención, no lo hice queriendo - unas lágrimas  empezaron a saltar de mis ojos. Zayn jamás me había gritado y no podía aguantar su rabia, entendía su cabreo pero no estaba preparada para sus gritos. Él se dio cuenta de que me hacía daño y me abrazó.
- Vale, no te preocupes - me acarició el pelo y empecé a sentirme mejor. Volvía a tener el olor a él y volvía a sentir su calor.

Narra Harry.
Necesitaba irme de fiesta, lo necesitaba mucho. Hace mucho tiempo que no salía y necesitaba que mi compañero de fiesta volviera a la normalidad. Acto seguido busqué a Zayn hasta que lo encontré abrazado junto a _____ . Hacían una bonita pareja.
- Esta noche nos vamos de fiesta ¿os apuntáis? 
- Prefiero descansar, otro día iré - dijo _____ sonriéndome como siempre, era preciosa. Se acercó y me dio un beso en la mejilla - Hace mucho tiempo que no te veía, estás más guapo - eso me subió la moral pero seguía esperando un sí por parte de Zayn.
- Yo me quedo y así le hago compañía a _____ - hoy tocaría fiesta solo, bueno con Niall, que últimamente le había pillado el gustillo a salir y a pasarlo bien. Después de varias horas preparándonos y arreglándonos, la verdad es que eramos peores que unas chicas, nos dispusimos a salir. Fuimos a un club donde tendríamos un poco de intimidad. Nada más entrar me fijé en una chica que estaba en la barra, estaba sola y me llamó muchísimo la atención. Me acerqué a ella para hablar pero al ver que me acercaba a ella dejó la barra y se fue fuera del local, la seguí, necesitaba saberlo todo sobre ella.

Narra Zayn.
Bajé al salón y _____ estaba buscando alguna película. Casi siempre iba vestida de verde y hoy no fue ninguna excepción. Le encantaba llevar gorros hasta por estar por casa. Yo me senté en el sofá mientras miraba curioso la película que quería ver. 

-¿ Buscas algo? - le pregunté y me fulminó con la mirada.
- Estaría bien que me dijeras donde guardas Un paseo para recordar - ¿cómo olvidarlo? Su película preferida.
- La tengo en otro sitio - salí corriendo escaleras arriba y la busqué en la cajón de mi habitación, de esta manera podría sentirla cerca de mi. Bajé y la puse, ella se quitó los zapatos y se acucurró en el sofá. Al final de la película me abrazó, por mucho que le encantara esta película odiaba el final.
- Su amor debería haber acabado diferente - me susurró al oído.
- Al menos ellos vivieron su amor hasta el final de sus días - dejé una indirecta que me salió sola.
- Todas las historias tienen una continuación - me dio un beso en la mejilla, se puso los zapatos y empezó a subir las escaleras.
- ¿Quieres decir que esta historia tiene continuación? - pregunté yendo detrás suya, ella se dio la vuelta y me sonrió. Lo sabía. Me acerqué a ella y la cogí en brazos. Sabía que este día llegaría. Le di un beso, un beso que hace mucho quería dárselo. Echaba de menos sus labios y sobretodo su gesto final, siempre terminaba mordiéndome el labio después de cada beso y está no fue la excepción. 
- Pensé en tomarme mi tiempo para decirte que ya superé la distancia. Fue un obstáculo en mi vida que por fin pude sacarlo fuera - dijo sin dejar de abrazarme. 
- ¿Nuestra historia vuelve a renacer? - pregunté para no quedarme con la duda, necesitaba tenerlo seguro.
- Nuestra historia nunca murió, se tomó un respiro y ahora sigue - esta vez fue ella la que me besó, me rodeó la cintura con sus piernas y nos tiramos en mi cama abrazados. 

Narra Harry.
- Hola, soy Harry - me acerqué a aquella chica de ojos grandes y grises, era rubia con algunas mechas rosas  claras. Me tenía loco y ella llevaba huyéndome toda la noche. Llevaba un vestido precioso, en realidad, toda ella era preciosa.

- Hola - por primera vez la vi sonreír - Soy Lina - me tendió la mano y en vez de estrechársela se la besé como un verdadero caballero - Tu no eres de aquí, ¿verdad? 
- Estoy de vacaciones pero me quedaré unos días - seguimos hablando, al final me dio su número de teléfono y yo le dí el mío. Ella tampoco era de Bradford, me contó que vivía en Wolverhampton, el pueblo de Liam pero que había venido con unas amigas de visita y al concierto de McFly. Por lo visto nos volveríamos a ver. 
- Bueno Harry, estoy encantada de haberte conocido y espero volver a verte pero mis amigas ya me esperan - me señaló a un grupo de chicas que estaba riéndose, por lo visto estaban borrachas. Lina me dio dos besos.
- En el concierto de McFly seguro que nos vemos - le contesté a lo que ella me sonrió. Se fue y me quedé mirando a lo lejos, a la nada.
- Te ha gustado, ¿eh? - me dijo Louis dándome codazos. 
- No - me puse rojo, lo podía notar, por lo visto si que me gustaba aquella chica y ya no pensaba en _____. - Puede que un poco pero nada - lo cogí del brazo y seguimos bailando.

A new life Cap.13

Narra Zayn.
Me desperté más enérgico que nunca, hoy estaba solo en casa, mi madre con mis hermanas se fueron de compras. Abrí las cortinas de la habitación y todo estaba hecho un desastre, algún día debería ordenar esto pero ese día no sería hoy. Entre tantas cosas que me comían la cabeza decidí ducharme y al poco rato bajar a desayunar. Me encantaba pasar los días yo solo, tranquilo en mi casa sin que nadie me moleste. Miré el frigorífico una y otra vez pero no encontraba nada de mi agrado, al final me quedé con un vaso de leche y galletas. Adoraba pasar todo mi tiempo en el escenario, era la mejor cosa que podía hacer. Me encantaba dar lo mejor de mi para hacer felices a otras personas. Todo el amor recibido por la gente me es incomprensible, sinceramente solo busco el amor de una persona pero ahora no es el caso. Di un brinco enorme al oír el móvil, no me acostumbraba a la música tan cutre que me había puesto Liam pero por ser él la dejaba. Las conversaciones telefónicas con mi madre son muy raras, mis únicas respuestas son bien, vale, sí, aja, aja y ella habla y habla y habla. Solo quedaban unos días para ese maravilloso concierto y esperaba que todo saliera bien. 

Narra Niall.
______ ya llevaba un buen rato en mi casa intentando sacarme cualquier información sobre la chica, me era difícil no contarle nada pero necesitaba desahogarme. Por una vez en su vida ______ había utilizado brillo de labios, iba progresando, su odio al maquillaje era incomprensible por eso la admiraba tanto aunque poco a poco se iba adaptando a usarlo. Por lo visto hoy no llevaba el collar de Zayn y eso me hizo dudar.

- ¿Llevas brillo de labios? - me hice el interesado para picarla, ella odiaba que le cambiara tanto de tema.

- Sí pero no me cambies de tema - ¡bingo! había acertado. - ¿Me lo vas a contar o terminarás yendo solo con los chicos al concierto? - me había descubierto.

- ¿Quién te lo ha contado? 

- ¿No pensabas contármelo? No me importa que vayan los chicos pero al menos podrías haberme informado. Nos vamos del tema, habla si no quieres que te lo saque a la fuerza - buscaba cualquier arma para sacarme la información y al final cedí, con ella era imposible.

- Como ya te dije, mi madre tiene una amiga en Sligo y hace una semana me obligó a ir con ella. Estando en la casa de su amiga decidí salir a pasear, parecía un pueblo tan tranquilo. En una esquina me choqué con una chica, era de estatura media, tenía el pelo oscuro y rizado, sus ojos me impactaron. Algunas chicas gritaban si te chocabas con ellas y otras se ponían histéricas porque era el rubio de One Direction, pero ella no era así, ella me pidió perdón con su acento español y decidí invitarla a un chocolate caliente. Pasamos bastante tiempo hablando y me contó que ella era de España pero hacía un intercambio en Irlanda. - tomé aire.

- ¿Cómo se llama? No puedes omitir detalles como esos - protestó un poco más satisfecha.

- Paula, se llama Paula. Nunca había oído ese nombre, es sinceramente bonito y ella también. - suspiré.

- Entiendo tu suspiro - me puso una mano en el hombre y ahora fue ella la que me cambió de tema - ¿Cuándo decías que nos íbamos a Bradford?

- Dentro de dos días - se quedó alucinada con mi respuesta, por lo visto no se la esperaba.- Ya se que no te esperabas ver a Zayn tan pronto y saltar en sus brazos declarándote y diciéndole que no hay nadie más que él - dije con tono de sarcasmo.

- Idiota - refunfuñó y me dio un empujón - Ya hablaremos tu y yo más adelante - entendía cada uno de sus gestos, de sus palabras y de sus gestos faciales. Cuando la conoces te das cuenta de lo fácil que es sacarle cada palabra y cada sentimiento solo mirándole a los ojos y sus gestos.

Narras tú.

Mañana ya era Navidad y pasado mañana partiríamos hacia Bradford, la verdad tenía unas ganas increíbles de irme ya, no entendía ese sentimiento dentro de mi, era algo más fuerte que yo.
La Navidad en mi familia fue como otros años, cena en familia, regalos cutres y películas cutres acabando con peleas cutres. Mi hermano estaba a punto de arruinar su vida ¿y todo por qué? Por culpa de María. Ella hizo que él abandonara su carrera de fotógrafo por la que tanto se había peleado con mi padre. La que acababa sufriendo siempre era mi madre, la pobre no tenía culpa de nada y siempre pagaban los platos rotos con ella.
Esa misma noche recibí un mensaje de Niall, desde hace dos días no lo veía y mañana sería el gran día.  
" ¿Todo listo? ¿Maleta? ¿Ropa? ¿Palabras preparadas? Serán unas vacaciones geniales, todo volverá a la normalidad "
Odiaba su manera de dejarme siempre con la duda y su forma de poner indirectas que era demasiado obvia pero no sabía el sentido en el que se dirigía. La maleta estaba preparada. Estas vacaciones me las pasé sacando ropa de la maleta, haciendo maleta, sacando ropa y volviendo a hacer maleta. Mi duda era, ¿dónde íbamos a dormir? Y se la hice caer a Niall en un mensaje al que me contestó al instante.
" En la casa de Zayn, no la que comparte con sus padres a la cual ya has ido sino la nueva que ha comprado"
Definitivamente mañana este monstruito se quedaría sin cabeza. En este momento lo único que podía pensar era en dormir y relajarme, como ya había dicho Niall esperaba que todo volviera a la normalidad.

Narra Niall.
-¿Quieres darte prisa? - le metí más prisa a ______ de la que ya tenía, ella ya tenía suficiente con sus tacones - ¿Podrás andar con los tacones?
- Podré andar con los tacones y tú, bonito, en vez de estar mirando como saco las maletas y como voy vestida, podrías ayudar. - dí un último vistazo a su ropa, sinceramente iba preciosa y ya sabía por era todo esto, y la ayudé con todas las cosas.

Aunque en Mullingar hacia un poco de fresco, estas navidades ya no son las que eran, con nieve por todos lados, muñecos de nieve y un frío que se te congelaban hasta los huesos. Se echaba de menos. Partimos hacia el aeropuerto, su hermano se ofreció a llevarnos. Pasaríamos unas vacaciones como en los viejos tiempo, llegaba el tiempo de la diversión y de las tonterías. Todos los viajes echos junto a ______ los tengo como los recuerdos más bonitos de mi vida. Antes de que ella viniera a Mullingar mi vida se basaba en casa, comer, estudiar, comer, colegio, comer, cantar, comer y dormir. Ella me impulsó a que diera el paso y me presentara a esas audiciones, le debo todo lo que tengo ahora ¿y ella que me pide? Que esté a su lado siempre, no quiere nada más y pida lo que me pida se lo daré todo, ella me dio esto y yo le daré lo demás. La miré y me estaba sonriendo, adoraba su sonrisa, le cogí de la mano que siempre las tenía calientes y me dio un beso en la mejilla, sus ojos me lo decían todo, lo nuestro era como una telepatía. Ella era mi media naranja, no de amor, sino de todo lo demás, nos complementábamos de tal manera que a la gente le costaba seguir una conversación nuestra. Llegará el día en el que pueda decirle con palabras todo lo que llevo dentro hasta entonces creo que le bastará con una mirada.

A new life Cap.12

Narras tú.

Me removí en la cama, sentía el frío recorriendo cada parte de mi cuerpo y el pelo del cuerpo se me erizaba, era una sensación placentera, notaba los pocos rayos de sol que había en estas fechas acariciando mi cara y poco a poco entreabrí los ojos. Las cortinas tenía un color diferente debido a la luz que penetraba en ellas. Me quedé en la cama examinando cada detalle de mi habitación. En ese escritorio Zayn me había dejado esa carta tan perfecta que sigo conservando como mi mayor tesoro, miré más a la derecha donde estaba mi biblioteca con todos mis libros, entre ellos Harry Potter y Amor y Amistad , los conservaba como otro tesoro, no tan valioso como la carta,  gracias a esos libros desarrollé mi imaginación y muchas ganas de seguir adelante sin preocupaciones y anteponiendo el amor y la amistad a todo. Seguí observado los detalles de mi habitación y cada cuadro y objeto colgante en la pared, cuando era pequeña me gustaba colgar cualquier tontería en las paredes y siempre acababa riñendo con mi madre por esas cosas. Toqué las sabanas de la cama y las olí, ojalá tuvieran ese mismo olor, ojalá conservaran parte de las noches pasadas con Zayn. Me levanté perezosa de la cama y me acerqué a la ventana, hice a un lado las cortinas y vi que estaba nevando, los copos de nieve chocaban contra mi ventana y al sentir el contraste se derretían. Podía oír los pasos de mi madre en el piso de abajo, lo más seguro es que esperaba que yo bajara para arreglar toda la casa para navidad. Abrí el armario buscando algo que ponerme y lo único que encontraba eran camisetas sin sentido, el día en el que me las compré eran perfectas y ahora cada día me desagradaban más, sabía lo que haría, mi madre también lo suponía, iba a dejarme toda la ropa aquí y en Barcelona me compraría otra y como era obvio, mi madre sabía que ya no me la pondría nunca y la donaría a la gente sin dinero, al menos a alguien le serviría. Al final encontré algo cómodo y perfecto para la ocasión. Adoraba de manera exagerada las Vans, y tenía todo tipo de colores y hoy tocaba Vans verdes. Mi collar no podía faltar, solo me lo quitaba para ducharme y a veces ni eso. 

Abrí la puerta y bajé al piso de abajo, olía a tortitas y salsa de chocolate. Miré buscando a mi madre pero no estaba por ningún lado.

- ¡Mamá! - grité para ver si obtenía respuesta alguna.

- ¡Estoy fuera!  - salí fuera buscándola pero hacía un frío tremendo hasta que la encontré al lado del buzón.

- ¿Qué haces? Entra ya, que te vas a congelar - protesté y dejé la puerta abierta para que entrara. Desayuné tranquila y después ayudé a mi madre con todos los preparativos. Subimos al desván donde encontré muchas cosas antiguas mías y algunas que me hacían emocionarme. - Pensé que la habías tirado - cogí una de mis muñecas, aún conservaba un brazo y una pierna, le había rapado la cabeza pensando que le crecería de nuevo, que ingenua fui.

- ¿Cómo voy a tirar una cosa así? Tengo todas tus cosas y las de tu hermano aquí, no sería capaz de tirarlas - me contestó mi madre.

Entre las dos bajamos todas las cajas con los objetos y decoraciones navideñas, cuando tuvimos todas las cosas ya bajadas cambiamos la disposición de las cosas en el salón dejando el árbol de navidad en medio del salón justo al lado de la chimenea antigua que aun conservábamos la cual también decoramos con muchos calcetines navideños y lazos. Nos disponíamos a abrir las cajas y decorar ya el árbol cuando tocaron a la puerta. Era mi hermano con su novia María, me alegraba tanto de volver a verle, por fin íbamos a pasar una navidad en familia como era normal.

- Pensaba que ya no llegabais - dijo mi madre contentísima, se veía a leguas que le encantaba que estuviéramos todos reunidos.

- Había tráfico, aunque no lo creáis - dijo María quitándose la bufanda y el abrigo. - Este invierno hace más frío de lo normal.

- Ibais a decorar el árbol sin mi - señaló mi hermano el árbol de navidad más sorprendido que nunca - Me habéis traicionado - salté encima suya como en los viejos tiempos haciéndole cosquillas y riéndose.

- ¿Os apuntáis? - preguntó mi madre sonriendo con un brillo muy especial en sus ojos.

- Claro - dijo mi hermano mientras abría una caja.

- James, amor, tenemos que organizar la ropa y limpiar la habitación - María nos había cortado el rollo, no sabía porque pero ni a mi madre ni a mi nos caía bien, hacía feliz a mi hermano pero era una plasta. James se encogió de hombros, cogió las maletas y los dos se fueron al piso de arriba. Miré a mi madre que se le había borrado la sonrisa de la boca. Iba a consolarla pero en ese momento volvieron a tocar al timbre pero sin esperar que abriera Niall se abalanzó en el salón.

- ¿Y esas caras tan largas? Que es fiesta, hombre - Niall le levantó el ánimo a mi madre y a mi. Nos ayudó a decorar el árbol y se quedó a comer. Me extrañaba que mi padre no haya llegado ya.

- ¿Y papá? - le pregunté a mi madre cuando estábamos los tres en la cocina comiendo. María y James dijeron que comerían luego y eso decayó más a mi madre.

- Tiene que trabajar horas extras. Debería haberse cogido vacaciones como yo - dijo suspirando.

- Siento interrumpir - dijo Niall hablando con la boca llena.

- Cielo, se que tu madre te ha enseñado muchas cosas y esta es una de ellas, no se habla con la boca llena - dijo mi madre riéndose mientras cogía los platos para limpiarlos.

- Perdona - tragó la comida y siguió hablando - Greg también ha vuelto hoy - me acordé de su hermano, siempre se había portado genial conmigo. 

- Por la tarde iré a visitaros - dije contentísima de poder pasar todas estas semanas junto a Niall en nuestro pequeño hogar.  Miré la cara de Niall, no era eso lo que quería decirme, me estaba ocultando algo y ya lo pillaría con las manos en la masa. Odiaba que me ocultaran cosas y más mi mejor amigo - Suéltalo ya - dije en un momento de desesperación. Niall me cogió de la mano y me sacó de la cocina.

- Muy buena la comida, señora Llorente - dijo Niall tocándose la barriga mientras eructaba. Era un cerdo de mucho cuidado. Nos sentamos en el sofá y después de echar varias miradas por si nos miraba alguien siguió hablando - Conocí a una chica.

- ¿Qué? ¿Tan rápido? Yo no puedo ni accionar y tu ya encuentras a otra - dije sorprendida.

- Pero no se lo que ella siente, creo que solo seremos amigos. No te cuento más porque prefiero dejarlo en un suspense por si acaso, además prefiero conocerla más antes de hablarte de ella. - iba a preguntarle de donde era esa chica y él ya sabía que lo preguntaría - Es de Sligo, aquí cerca - contestó. ¿Qué hizo este chico en Sligo? - Acompañé a mi madre a casa de una amiga suya y ahí la conocí - fue como si me hubiera leído la mente - La verdad es que el salón y la decoración ha quedado bastante bien.

- Cambias mucho de tema y haces que me pierda por el camino - me reí y él hizo lo mismo.

- Me voy, mi madre quiere que la ayude en unas cosas, escapé para verte y ahora ya me voy - me dio un beso en la mejilla y saludó a mi madre - Hasta la noche señora Llorente - mi madre le devolvió el saludo y Niall se fue, no sin antes mandarme un beso con la mano.

- ¿Por qué no le propones que se mude aquí? Si total esta todo el día metido aquí - mi madre se sentó a mi lado en el sofá y su propuesta me hizo bastante gracia.

- Propónselo, seguro que acepta - le contesté y le di un beso en la mejilla - Estamos como antes, no te preocupes más. Lo de hoy ha sido un berrinche, nada más. - sabía que le angustiaba por dentro que su hijo pasara de estar manera de ella - Voy a hacer la cama y a ordenador la habitación - me levanté decidida y al entrar en mi habitación estaba todo más desordenado de lo que lo había dejado, era un desastre total. Me puse a limpiarlo todo intentando dejarlo como nuevo.

- ¡ Te llaman! - gritó mi madre desde el piso de abajo y bajé corriendo en busca de mi móvil.

- Te ha costado cogerlo - gritó Liam al otro lado del teléfono.

- ¿Cómo es que se te ha ocurrido llamarme? - dije contenta, él me hacía feliz y me encantaba pasar todo el tiempo del mundo junto a él.

- Quería saber como te encontrabas y si estabas lista para el concierto de McFly - está era una de las cosas que Niall no me había contado. - Los chicos están más que contentos, Eleanor y Danielle ya han empezado a hacer compras.

- ¿Es que nos vamos a quedar más de un día? - pregunté sorprendida.

- En Bradford nos vamos a quedar hasta después de tu cumpleaños y el de Zayn - iba a matar a Niall, pequeño monstruo, ¿cómo ocultarme esas cosas? 

- ¿Danielle como está? - cambié de tema.

- Genial, hace mucho que no te vemos y estamos los dos ilusionados de verte - Liam y su típica ternura. Nos pasamos más de media hora hablando hasta que caí en la cuenta de que debía seguir limpiado.

- He dejado la limpieza a medias, después te llamo - Liam estuvo de acuerdo con que limpiar antes de hablar, aunque se rió antes de colgar. Yo seguí con mis tareas de siempre mientras oía a James discutir con mi madre. Las vacaciones empezaban bien.

A new life Cap.11

Narras tú.
A la mañana siguiente me desperté más temprano de lo normal, tenía que coger el avión a las 12 y cuando yo me desperté eran las 8, me levanté perezosa de la cama y miré por última vez las maletas para comprobar si tenía todo lo necesario. Al salir de la habitación miré por el pasillo y Clara estaba en la cocina tomándose un café. Por lo visto ella también se había levantado temprano pero por lo que me había dicho ella se iba a las 10 en tren. Iba ya vestida, llevaba un conjunto monísimo y con unos botines de infarto. Eché una mirada rápida y vi que tenía el collar que Carlos le había regalado, al menos lo suyo si que fue un para siempre o al menos lo que durara. En el sofá, al lado de todas sus maletas había un bolsa, por fin se había decidido a llevar un bolso, pensé que nunca vería algo así.

- Buenos días, princesa - dijo sonriente desde la cocina.
- Voy a la ducha - señalé el baño y me metí dentro. Me hacia mucha falta relajarme y estas semanas serán lo más relajante del mundo. Salí y ella seguía en el mismo sitio con la misma taza - ¿Ese café es interminable?
- No - se rió - Estaba pensando - dijo con una sonrisa medio fingida.
- ¿Quieres hablar de ello? - me senté a su lado con el pelo aún mojado.
- Me hará falta - suspiró. Su suspiro me lo tomé como un alivio de "por fin" - Cuando te fuiste Dani se pasaba horas y horas metido aquí dentro, había noches que se quedaba en tu habitación durmiendo, a veces me lo encontraba llorando y no sabía la manera de consolarle, y él sabía perfectamente lo que pasaba. Un día tuve una discusión muy fuerte con Carlos que siempre empiezan por tonterías y acabamos llegando a otros asuntos. El caso es que llegué a casa y él estaba en el sofá viendo la televisión y yo como siempre que estoy mal, me metí en tu habitación buscando algo tuyo para animarme. No podía llamarte, no quería molestarte y fue Dani el que me apoyó. Con todo el cariño que me dio me cegué y pensé que era Carlos, me abalancé y lo besé, nos liamos, estuvimos a punto de hacer....eso, pero no. Él me obligó a parar y me arrepiento mucho - su relato me dejó sin palabras y con la boca abierta.
- Esas cosas suelen pasar, si tu admites y sabes que fue un error pues se queda en eso, un error - puse mi mano sobre su hombro y la acaricié - Voy a vestirme, y deja las preocupaciones, que nos vamos de vacaciones - le di un beso en la mejilla y entré en mi habitación. ¿Dani durmiendo aquí? ¿En esta cama? Habían tantos recuerdos. Empecé a llorar, no sabía si era de felicidad o de melancolía pero el caso era que sonreía como tonta. Miré el conjunto que me había preparado antes de hacer las maletas y me lo puse, pero antes me sequé del todo el pelo. Cuando  ya acabé y me miré al espejo me di cuenta que eran las 9 y tenía que llevar a Clara a la estación. Estas botas me quedaban realmente bien. Adoraba los gorros pero el primer complementos que me puse fue el collar de Zayn, antes que la camiseta, antes que todo. La pulsera me hacia recordar a los chicos, a mi Niall por el trébol y a los demás por la bandera.

Clara estaba agradecida por ayudarla con las maletas y por llevarla a la estación. En su cara noté que quería decirme algo.

-Clara, cariño, la próxima vez que quieras confesarte ve a  un cura, que por aquí hay muchos pero esta te la paso, suéltalo ya o me matas de los nervios - dije conduciendo con cuidado. Me saqué el carné hace poco y esperaba conservarlo para siempre.

- Solo quería darte las gracias - se ruborizó - pero como sé que a ti no te gusta que te den las gracias intentaba decírtelo con otras palabras pero contigo no se puede.

A los 40 minutos llegamos a la estación, había mucho tráfico por lo que nos vino bien arrancar antes. Ayudé a que suba las maletas al tren, nos despedimos, Clara echó unas cuantas lágrimas pero eso era típico en ella.

- Nos vemos pronto, esto no es una despedida. - le dí un largo abrazo y  la despedí con la mano. Ahora solo tocaba volver a casa, desayunar algo y después llamar un taxi, no quise comprometer a nadie para que me llevara así que decidí que era mejor llamar un taxi.

Narra Niall.

Los nervios podían conmigo, por culpa mía y de sus padres ella tenía que venir en avión, la cosa que más odiaba. Yo llevaba más de media hora en el aeropuerto de las afueras de Mullingar pero no anunciaban nada. No paraba de preguntarles a las recepcionistas cuando llegaría el avión y me decían que me calmara. ¿Estábamos locos? En estas situaciones y sabiendo lo mal que lo estará pasando no se puede uno calmar.

-¡Niall! - su dulce voz gritó detrás mía y me dí la vuelta, allí estaba ella más guapa que nunca, dejó la maleta en el suelo y salió corriendo a abrazarme.

- Parece que hayan pasado años - dije entre lágrimas y risas, era típico cuando estaba emocionado. La ayudé con las maletas y nos fuimos a su casa. Su madre estaba muy contenta de verla. Su padre estaba como siempre, tieso sin decir ninguna palabra. 

- Me encantan las botas - le dije cuando ya estábamos solos en su habitación arreglando el armario.

- ¿Tienes fiebre? - no era muy normal que  yo le hablara de ropa y menos de botas - ¿Qué pasa? ¿Qué era ese asunto?

- Lo hemos arreglado todo. Estoy definitivamente soltero - dije abriendo los brazos como un pájaro cuando vuelva que es libre. - Y recordando nuestro pacto, tu ahora tienes que hablar con Zayn - dije carraspeando a lo que ella me miró.

- Todo a su tiempo - dijo haciendo unos gestos con la mano - ¿Qué tal la gira?

- Bastante bien, tenemos estas semanas libres hasta después de tu cumpleaños y el de Zayn y volveremos al escenario. Es un gusto volver a cantar delante de tantas personas, es un sentimiento al que aún no me acostumbro. Siento las mismas mariposas en el estómago como la primera vez. - ella me miraba curiosa poniendo un gran punto de interés en mi sonrisa. - En octubre volvimos a The X Factor, fue mágico volver a entrar por esas puertas. Estuve más que emocionado. Hay varios grupos buenísimos, pero me llama la atención uno en especial, District 3.

- Nunca lo había oído - puntualizó ella.

- Mañana veremos el programa y recordaremos viejos tiempo. - no podía parar de sonreír, cuando estaba con ella que tanto me había ayudado volvía a ser yo, era diferente, me hacía sentir como en casa estuviéramos en cualquier parte del mundo. Su afecto y su cariño desprende un calor tan acogedor que no podía fingir. 

Narras tú.

- ¿Te apetecería pasar el fin de año conmigo en Bradford? Tengo las entradas para el concierto de McFly - me dijo Niall más que contento. Eso me hizo recordar el regalo de mi cumpleaños y la primera vez que conocí a Zayn chocandome accidentalmente con él. Zayn siempre que puede me lo recuerda y ese momento siempre será un recuerdo perfecto dentro de mi.

- No podría estar más de acuerdo - dije más feliz que una perdiz, salté encima de Niall cayendo los dos al suelo.

- ¿Niall, te quedas a comer? - gritó mi madre desde el piso de abajo pero se autocontestó - Que pregunta más tonta, no rechazarías una comida por nada del mundo - oímos como mi madre se reía.

- Esto me hace recordar los viejos tiempos - puntuó Niall - ¿Te acuerdas cuando nos quedábamos el uno en casa del otro viendo películas o hablando de tonterías? ¿ O en clase nos pasábamos los exámenes? Me acuerdo de esa vez que la profesora Jonhston me pilló comiendo en clase y me quitó el bocata, pero tu me diste el tuyo y nos echó a los dos de clase - recordando esas cosas nos reímos como locos a carcajadas.

-¡Bajad a cenar! - gritó mi madre.

- Si que es rápida - dije más que sorprendida de mi madre.

- Ha mejorado mucho en la rápidez, los días que estuve por aquí y tu estabas estudiando siempre me quedaba a comer aquí - Niall ya bajaba corriendo las escaleras rumbo a la cocina.

A new life Cap.10

Narra Harry.
_______ estaba muy enfadada y con razón, Louis tuvo toda la razón del mundo, no debería haber venido. Solo he hecho que ellos se preocupen por mi y que ______ me tome por un irresponsable. Ya estaba bien, tenía que tomar valor y dejárselo todo claro de una vez por todas. No podía irme con esa angustia en el pecho, esperé mucho tiempo  y creo que ya era tiempo de soltarlo todo.
- Me voy a ir pero no sin aclararlo todo antes - me paré en seco y ella hizo lo mismo que yo, me hizo un gesto para que prosiguiera y eso hice pero antes tomé aire - Fui y sigo siendo un irresponsable pero me da mucho miedo crecer, quiero saltarme las reglas para sentirme como un niño. Me gusta ser cantante, estoy cumpliendo mi sueño pero tengo miedo cada vez que salgo al escenario, cada vez que tengo un solo, tengo miedo de cagarla y que todos sufran por mi culpa. Fui un irresponsable al venir aquí sin decir nada a nadie, pero necesito tenerte cerca porque si estás lejos te pienso, y si te pienso tengo miedo de enamorarme y sé que lo pasaré mal. Tu estás enamorada de Zayn, ¿que cojones haces aquí con Dani? No voy a ser un estorbo porque tengo un miedo increíble de que esto acabe mal y que Zayn ponga punto final a nuestra amistad. - respiré, tomé aire, aguanté las lágrimas e intenté seguir - Déjate de tonterías, tu lugar está junto a Zayn, déjate la distancia. La distancia no existe solo está en tu imaginación y te estás emparanoyando con todo este tema de la distancia, se está apoderando de ti pero no la dejes, sé más fuerte que ella. Odio verte mal, odio verte sufrir y por encima de todo odio ver como te hundes por culpa de la distancia. - miré a ______ y tenía los ojos entre lágrimas, se abalanzó sobre mi y me dio un abrazo larguísimo.
- Gracias - dijo suspirando y entre sollozos - No estoy con Dani - me aclaró una de mis tantas dudas. Se separó de mi y me dio un beso, fue corto pero sabía lo que significaba, se despedía de lo nuestro, lo guardaría en el cajón de los recuerdos.
- Ahora tengo que volver. Mi lugar está junto a ellos - por fin pude sacar todo lo que tenía dentro, ahora me podía ir tranquilo sin remordimientos. Caí en la cuenta de que no podía despedirme de Henar, a Clara no le decía nada porque la podía ver siempre que quería además tenía la impresión de que no le caía muy bien. - Despídete de Henar por mi, dile que pronto nos volveremos a ver - la verdad es que era una chica muy guapa y divertida.
- Claro - dijo ella limpiándose las lágrimas y sonriendo - ¿A Clara le transmito algo?
- No - me quedé pensando - Bueno, sí, dile que pronto le caeré bien - a lo que ______ se rió como loca.
- Pero si le caes bien, tonto. Ella está así porque no está acostumbrada ,es mas, es una gran fan vuestra - me contestó a lo que me quedé más tranquilo. - ¿Te llevo yo o coges un taxi? - me quedé pensativo.
- Mejor cojo un taxi, no estás en condiciones de conducir - le di un beso en la frente - Hasta la próxima, pequeña - me encantaba decirle pequeña, ella era la cosa más grande del mundo pero era mi pequeña protegida.
- ¡Harry! - bajó corriendo las escaleras persiguiéndome - No tengas miedo de luchar por aquello que quieras ni tengas miedo por aquello que tienes. Disfruta de los momentos encima del escenario y disfruta de los chicos y de cada momento. Piensa que crecer es algo que hace falta pero mientras tu sigas siendo el mismo solo habrá madurado tu cuerpo. - me dio otro abrazo y volví a bajar las escaleras - ¡Muchas gracias por abrirme los ojos! - me gritó cuando yo ya abría el portal. Sus palabras también me llegaron al corazón, por fin estaba feliz y me sentía libre. No la había perdido, siempre estará dentro de mi corazón y gracias a ella he superado muchas cosas, siempre será mi pequeña.

Narras tú. 
El discurso de Harry me había dejado sin palabras, en parte tenía toda la razón del mundo pero Zayn se merecía sufrir un poco. No, la verdad no se lo merecía pero no podía hacerle esto a Dani, me sentía mal conmigo misma si lo hacía. A los pocos minutos llegaron Henar y Clara, se quedaron sorprendidas al no ver a Harry.
- No preguntéis - me levanté del sofá, cogí las llaves e iba a salir - Harry os manda saludos - salí por la puerta pero volví a entrar - Henar, Harry dice que espera volver a verte pronto - vi como se le iluminaban los ojos y salí por las puerta. Hoy hacía más frío de lo normal y por lo visto yo iba muy fresca. Mis leggins negros y mi blusa eran demasiado finos para este tiempo.

Por la calle había poca gente pero la gente que había era feliz y sin preocupaciones, iban de tienda en tienda, paseando, riéndose, felices. Por impulso miré el collar que Zayn me había regalado por mi cumpleaños, la palabra Love, me dijo que eso nos iba a definir para siempre. Era difícil olvidarle si siempre lo tenía presenta conmigo, en todos lados. Quedaban pocos meses para nuestro cumpleaños, siempre pensé que ser del mismo día era solo una coincidencia pero cada día me convenzo más de que es cosa del destino. De repente empezó a llover y me metí en la primera pastelería que encontré, ahí en todas las mesas habían parejas. Se veían tan felices juntos. ¿ Por qué todo estaba en contra mía? Salí corriendo de la pastelería por la lluvia en las calles vacías, mi móvil sonaba sin parar pero ni me fijé quien llamaba, al final de tanto insistir tuve que cogerlo.

- ¿Dónde estás? - era Clara, desesperada gritando al otro lado del teléfono.

- En unos minutos llego a casa - colgué y seguí andando, no sabía hacia donde iba pero necesitaba respirar este aire fresco, sin cargas y sin peso sobre mi pecho.

{Pasados dos meses}

Narras tú.

En Barcelona hacía más frío de lo normal, estábamos a mediados de diciembre y todo el aire navideño se notaba. Mis padres esperaban que pudiera pasar las navidades y el año nuevo con ellos y yo esperaba poder ir a verles pronto. Clara hoy estaba más preocupada de lo normal, no sabía que decirle ni como tranquilizarla.

- ¿Qué te pasa? - la interrogación más seca y más común que encontré.

- No fue culpa mía, Dani se lanzó yo no tuve nada que ver - Clara empezó a llorar de los nervios y del cabreo, poco a poco iba entendiendo su angustia.

- No te culpes, no se lo que habrá pasado pero tu tranquilízate e intenta olvidarte de todo ese asunto - dije con tono tranquilo para no alterarla más.

- ¿Qué le digo yo a Carlos? 

- Nada, estás cosas pasan y Carlos no tiene porque saberlo - se sentó en una silla de la cocina y respiró hondo. -  ¿Dónde vas estas vacaciones? - cambié de tema para hacerla sentir mejor.

- Con mis padres y de año nuevo Carlos y yo nos vamos a Francia - ahora en su cara se había dibujado una sonrisa gigante. - ¿Y tú?

- Pasaré las navidades y el año nuevo con mis padres y mi hermano. Solo volveré después de mi cumpleaños - mi sonrisa pícara volvió a aparecer para delatarme.

- Sé lo que estás planeando, pillina - Clara me dio un codazo y nos reímos juntas - Ahora que hemos acabado los exámenes y los hemos sacado adelante podremos hacer las maletas tranquilas.

Las dos nos fuimos a nuestras respectivas habitaciones para preparar las maletas, en un día yo me iba a Mullingar y Clara se iría a Gijón. Metí todo lo necesario y lo innecesario también, en la maleta. De repente mi móvil sonó como loco pero no lo encontraba, revolví toda la habitación hasta encontrarlo.

- Dígame - contesté eufórica.

- ¿Has acabado ya la maleta? Estaré en Mullingar así que prepárate para unas vacaciones como en los viejos tiempos - Niall empezó a reírse al otro lado del teléfono y yo al contagiarme hice lo mismo.

- Eres un pequeño monstruito - afirmé riéndome.

- Lo sé - carraspeó - Ya he resuelto ese asuntillo - dijo poniendo voz de intriga pero no lo seguía.

- ¿Dónde me he perdido? 

- ¡No me lo puedo creer! Tanto insistir y ahora no te acuerdas - Niall intentaba hacerse el enfadado pero lo único que le salió fue una risa - Ya te lo contaré mañana que nos vemos. Cuídate y no te pongas nerviosa en el avión.

- Muchas gracias por recordarmelo - me puse sarcástica - Hasta mañana - le mandé un beso a través del teléfono y volví a preparar las cosas. Este chico me volvió a dejar con la intriga, le gustaba hacerme sufrir pero ya se la devolvería.

- ¿Has visto mi sudadera azul? - me gritó Clara desde su habitación.

- ¡Está aquí! - le devolví el grito. Clara y yo teníamos la costumbre de prestarnos la ropa y los zapatos, nos encantaba la ropa que se compraba la otra y la nuestra siempre nos parecía anticuada. Entró por mi puerta y le lancé la sudadera. Puse mi mano sobre el collar de Zayn pero no estaba, me desesperé, busqué por toda la habitación, en el salón hasta llegar a la habitación de Clara - ¿No habrás visto....? - no acabé la frase a lo que ella contestó.

- Te lo dejaste en el baño cuando te duchaste - me lo entregó de forma delicada y con cariño. No se lo que haría sin esta chica, era mi apoyo del día a día y aunque teníamos nuestros roces como buenas hermanas siempre acabábamos abrazadas llorando juntas.

A new life Cap.9

Narras tú.
Mientras ayudaba a Harry para instalarse en mi habitación caí en la idea de que él debería estar de gira.
- ¿Tu no deberías estar de gira? - le pregunté.
- Retrasaron la gira dos semanas, por eso decidí pasar a visitarte. - me extrañaba que Niall no me lo hubiera contado, había hablado con él antes de ayer y me contó que estaba de perlas volviendo al escenario y le sentaba de maravilla. Aquí algo no encajaba pero hice como que me lo tragaba. No sabía como se había tomado Henar la presencia de Harry, sentía un profundo amor hacia Harry y yo no sería la que le diría que Harry estaba colado por mi, aunque como estaban las cosas últimamente parecía que ese sentimiento había acabado. Por lo visto Harry estaba más que agusto, esperaba que su visita le sentara bien aunque por aquí todas estaban locas por ellos y más por Harry.
- Tengo una duda - Harry arqueó las cejas - ¿Cómo vas a salir a la calle sin que todas tus fans te reconozcan? Déjame recordarte que aquí te reconocen hasta de travesti - no se resistió ante mi comentario y se rió.
- Buscaremos algún plan para salir.
- ¿Buscaremos? Espera, ¿tu y yo? O sea, ¿nosotros? - me reí sarcástica - Perdona, no no, este es problema tuyo.
- Si prefieres salgo normal a la calle y tendrás que soportar el grito y la persecución de muchas chicas - me contraatacó.
- Vale, tu ganas. - me rendí - Solo te voy a poner una regla - esperó mi respuesta y proseguí - El tiempo que pases en esta casa quiero que vayas vestido, ¿me explico? Se tus maneras raras de andar desnudo y entre chicas como que no.
- ¿Te pones celosa? - sonrió seductoramente - ¿Y aquí contigo, los dos solos, tampoco puedo?
- Tampoco - le puse punto final a la conversación.

Narra Clara.
Henar era una de mis mejores amigas, por no decir mi hermana, y Harry era un chico encantador y me caía genial, pero esta visita de los dos a la vez iba a salir mal. Lo veía venir. Estaba super contenta de tenerla aquí, hace un año que no la veía y se le echaba muchísimo de menos. Ella se veía super ilusionada porque Harry estaba aquí, sabía lo que ella quería y yo solo esperaba que lo consiguiera.
- No sé si voy a aguantar en la misma casa que Harry, respirando el mismo aire que él y comiendo en la misma mesa que él - dijo Henar mientras se sonrojaba.
- ¿Te apetece ir de compras? - cambié de tema a lo que ella afirmó - Ya que te has instalado, coge tus cosas que nos vamos de shopping - Henar cogió su bolso y salimos de la habitación.
- ¿A ______ y a Harry no se lo decimos? - preguntó Henar.
- Sí - tomé aire para gritar - ¡______! - ella salió corriendo de la habitación.
- No me des esos sustos, esto es una casa no un zoológico - contestó medio cabreada.
- Solo me haces caso cuando grito - me defendí - Al tema, Henar y yo nos vamos de compras, ¿os apetece venir?
- Harry dice que está cansado y prefiere quedarse en casa viendo alguna película. Pasarlo bien - nos sonrió y en ese momento la cogí del brazo y me la llevé a parte de donde estaba Henar - ¿Qué pasa?
- Pórtate bien, ¿vale?.
- Clara, que no tengo cinco años - con esa frase acabó nuestra conversación y me fui con Henar. El centro comercial estaba bastante lejos por lo que tuve que conducir, al menos no estaba sola. Hoy echaba de menos más de lo normal a Carlos, me hacía falta. Aún no tuve el valor de contarle lo que pasó con Dani. Dani y yo quedamos en no decir nada ya que fue una tontería sin sentido, pero sentía la necesidad de decírselo, tenía un nudo en el estómago cada vez que pensaba en eso.
- ¿Estás bien? - Henar ya me conocía bien y sabía que algo no iba bien pero no podía involucrarla en esto, era demasiado.
- Nada, solo deseo pasar un gran día contigo.

Narra Harry. 
Por lo visto me había quedado solo con ______, iba a ser una gran tarde, tenía tantas cosas que decirle. Simplemente el echo de estar con ella me hacía feliz. Ella estaba en la cocina preparando palomitas mientras yo buscaba alguna película, sentía intrigación sobre que pensaba su novio de mi estancia aquí, no quería meter mierda entre ellos, bueno sí, sí que quería pero no era el caso que ella se diera cuenta de esto.
- ¿Las quieres con chocolate o con mantequilla? - me preguntó enseñándome los dos paquetes de palomitas.
- Uno con chocolate y más tarde con sal. - ella metió las palomitas al microondas e hizo una cosa rara con el chocolate - ¡No! - grité y ella me miró sonrojada - Déjame, que no sabes.
- Sabrás cocinar tu mejor que yo - protestó mientras se quitaba para dejarme paso.
- Las palomitas son mi fuerte y más en cuestiones de chocolate - me reí por lo bajo al ver su cara imitándome y decidí que era un buen momento para contraatacar - ¿Por qué no invitas a Dani también?
- Está de gira - me contestó intentando sonreír.
- ¿No le molesta que yo esté aquí? - volví a preguntar.
- Se te están quemando las palomitas - se veía un poco molesta al sacarle el tema así que decidió cambiar de tema. No quería hacerla sentir mal , su tristeza me hacía sentir mal a mi y solo quería verla feliz.
 -¿Has acabado ya con las palomitas? - me volvió a cambiar de tema, hoy no la pillaba por ningún lado. 
Acabé las palomitas y nos pusimos a ver una película, fue la primera que pillé a voleo y por lo visto era la película favorita de Zayn y también de ______. Estos dos tenían muchísimas cosas en común pero siempre se decía que los opuestos se atraían.

Narra Zayn.
Llevaba todo el día sin ver a Harry, se me hacía sospechoso. El management nos había dado cinco días libres y este chico se había largado sin decir ni mu. Habíamos acordado en pasar estos días juntos. 
- Yo voy a Mullingar - bajó Niall las escaleras demasiado entusiasmado - Tengo un asunto  pendiente - por fin iba a arreglar toda su historia con Leonor.
- Buena suerte - le dije sonriente.
- Eleanor viene de visita - Louis cogió las llaves del coche y salió por la puerta. Suponíamos que iba a recogerla.
- ¿Tu y yo que hacemos? - me preguntó Liam desde el sofá.
- ¿No vas a quedar con Danielle?
- Tiene que bailar y no tiene tiempo - dijo algo decepcionado - Pero vendrá a visitarme cuando acabe todos los programas que tenga - a pesar de la distancia estos dos podían seguir juntos. ¿Por qué _______ no podía? Había dicho que se lo pensaría pero ¿ cuanto tiempo? Ella podría visitarme, sabía que lo tenía difícil con la universidad pero eso se podía arreglar. - No te desanimes, verás que pronto todo esto se arregla - dijo Liam animándome.


Narras tú.
Harry hablaba por teléfono y podía oír los gritos desesperados de Louis al otro lado del teléfono. Poco a poco lo iba entendiendo todo, Harry estaba aquí por mi, por intentarlo, lo había hecho a espaldas de los chicos y solo quería que yo me quedara con él y no con Zayn. No podía creer su facilidad de estropearlo todo. Para mi era solo un buen amigo, alguien que me había comprendido en las buenas y en las malas, alguien a quien jamás pude ver como algo más y tenía que dejárselo todo claro de una vez.
- Tienes que irte - le solté al colgar el teléfono - No va a pasar nada, Harry. Eres un amigo genial y te quiero, pero es solo un "te quiero como amigo". No puedes seguir con esto y menos engañar de esta manera a Zayn. Él no se lo merece y lo sabes. 
- Pero... - intentaba hablar.
- Pero nada - apagué la televisión y volví a hacerle la maleta - Hay un vuelto de última hora. Te llevo al aeropuerto. Tu lugar está con ellos, no conmigo.

A new life Cap.8

Narras tú.
Clara y yo nos preparamos para ir de fiesta, yo aún seguía con la duda de saber que hicieron estos dos, dos semanas bastaron para cualquier cosa. No, mejor me olvidaba del tema, no era asunto mío. 
El vestido de Clara era impresionante, me dejó boquiabierta.
-¿Tú vas a la discoteca o vas a ligar? - le dí un beso en la mejilla y se puso colorada.
-Calla, que me pongo roja y se me va el maquillaje. - dijo aún ruborizada.

-Es verdad, tía. Algún día me tienes que prestar estos zapatos rosa, son totalmente adorables, pero ¿no te vas a matar con ellos? - dije riéndome.

- Pues anda que tu, vas a ir de cabeza, mona. - se defendió de mi ataque - Tu también vas monísima, ¿tú por qué no te pones roja?

- No se, últimamente he dejado de ponerme roja por cualquier cosa. - me encogí de hombros.

- ¿Quieres que te ponga un poco de brillo de labios? - preguntó Clara a lo que negué con la cabeza.

- No, tía. Sabes que odio el maquillaje. - me cogí el bolso azul y le hice señas para que saliera ya de una vez.

- ¿Conduces tú? - preguntó Clara y negué con la cabeza. Se me había pasado decírselo. Carlos iba a pasar a recogernos y nada más bajar y ver el coche de su novio saltó sobre él y le dio un beso de película. Parecía que no se habían visto desde hace años.

 La noche pasó muy tranquila, estuvimos en la discoteca hasta las tantas de la noche, ni me acordaba a la hora que había llegado a casa solo recordaba que a las 11 me levanté y vi a Carlos en calzoncillos en la cocina. Bostecé una vez, me miré en el reflejo del microondas y vi mi cara de susto. 

-¿Qué haces aquí? - le pregunté a Carlos sin importarme mucho como iba vestido, sinceramente no llevaba nada encima.

- Ya te lo puedes imaginar - dijo con una sonrisa pícara. Buscaba algo en el frigorífico pero no encontraba. Al final decidió abandonar y buscó en los armarios, se cogió una barrita y mientras volvía a la habitación de Clara me guiñó el ojo.

- Hasta la próxima - decidí abordar la misión de desayunar y meterme a la ducha pero la puerta del baño estaba cerrada - ¿Quién coño está en el baño? - grité como una desesperada. Nadie contestaba y empecé a aporrear la puerta como una loca hasta que Clara salió de su habitación, se acercó a la puerta y la abrió - Gracias - dije ruborizándome. La puerta estuvo abierta todo el rato, ¿qué me pasaba? Puto alcohol.

{Pasadas dos semanas}

Narras tú.

-¡Clara! - grité como loca mientras me vestía de forma desesperada, eran las 8 menos 20, llegaría tarde. Clara no estaba, no me contestaba. Me acabé de vestir, me metí una magdalena fugaz a la boca y salí como una bala dirigida hacia la universidad. En la mano llevaba los apuntes y algunas hojas sueltas, en la otra mano tenía la carpeta e intentaba meter todos los papeles pero no había remedio. En 15 minutos entré por la puerta de la universidad. En un momento de desesperación total alguien se chocó conmigo y todos mis papeles salieron volando.

-¡NO! - grité más que desesperada. - ¡Coño! Mira por donde vas - no podía aguantar la rabia que llevaba dentro, sabía que el chico no tenía la culpa de nada pero llegaba tarde y encima con todo desordenado. - La próxima vez lleva más cuidado. - el chico se ruborizó e intentó  pedirme perdón pero pasé olímpicamente de él. Recogí mis hojas y entré a clase. El día se me pasó volando, por la tarde llegué a casa exhausta y cuando vi a Clara en el sofá le reproché.

- La próxima vez despiertame, no te vayas tan fresca dejándome durmiendo para que llegue tarde y encima asuste a un chico. - tiré las cosas encima de la mesa y entré a la cocina para prepararme algo de comer.

- Fui a tu habitación, te grité como loca pero no reaccionabas, no había manera de despertarte y salí corriendo porque también llegaba tarde - me quedé de piedra pero fingí que no había oído nada.

Pasamos el día tranquilas mirando alguna que otra película. El día siguiente fue más o menos parecido a este, me volví a despertar tarde, volví a vestirme con prisas pero esta vez elegí mejor mi ropa. 

Mis ondulaciones bajaban por mi espalda y la diadema con el lazo conjuntaba muy bien con las ondulaciones. Llevé más cuidado para no chocarme con nadie y entrando a clase me senté en el único sitio que quedaba libre al lado de un chico de pelo castaño, ojos verdes esmeralda y con pelo corto con cresta, era el mismo chico que me tiró las cosas ayer. Me puse colorada, me acordé del show que le monté y me entró una vergüenza enorme. Me dedicó una mirada y él también se ruborizó y bajó la mirada, cuando ya estuve instalada en mi sitio decidí hablarle y pedirle perdón por lo de ayer.

- Lo siento mucho por lo de ayer - le dije por lo bajo y asintió, no me dirigió la palabra en toda la clase. Al finalizar la clase me levanté para dirigirme a la clase de marketing. Aunque Clara y yo vayamos a la misma universidad hacíamos clases diferentes.

- Soy Miguel - me dijo el chico con voz delicada y quebradiza.

- Yo _____ - me presenté rápido ya que tenía mucha prisa - Tengo mucha prisa, llego tarde a marketing - salí de la clase.

- También voy a marketing - me sonrió y fuimos juntos a la próxima clase. El día pasó muy tranquilo, entre apuntes y prácticas las clases se pasaron volando. Cuando haces algo que de verdad te guste lo demás es pasajero. Me despedí de Miguel y me encontré con Clara en el patio de la universidad.

- ¿Quién era ese? - preguntó fulminándome con la mirada.

- El chico que le grité ayer por culpa tuya y va a varias de mis clases. Ahora vayámonos, me apetece un café. - nos fuimos rumbo al Starbucks más cercano y ahí había un montón de chicas fulminándome con la mirada. Unas sonriendo, otras de mala leche y otras neutras. - Clara - la cogí del brazo- ¿Aquellas chicas nos están mirando o estoy yo colocada?

- No estás colocada y sí, nos están mirando - en ese momento una se me acercó y empezó a hablarme tan rápido que no la seguía.

-¡Por favor, cuídalo bien! - fue lo único que entendí de todo lo que me había dicho, en ese momento se fue. Tenía un miedo impresionante, Clara decidió pedir los cafés para llevar y nos fuimos a casa. Me encerré en mi habitación pensando en que podía haber pasado, busqué y busqué hasta que encontré algo que todo encajaba. Niall. Busqué su número de teléfono y lo llame, una vez, dos veces, tres veces, no lo cogía. Decidí abandonar y abrí el portátil. Hace unos meses Niall me había hecho un twitter así que tenía por donde investigar. De repente vi mis seguidores, unos 550.000, todas eran fans de One Direction, creo que se llamaban directioners, entré en el twitter de una. Salía una foto mía con Niall paseando por ese campo de las afueras de Mullingar y ponía que era la supuesta novia de Niall Horan. Me reí como tonta y vi que la chica esa me defendí de muchas otras que tenían mala lengua. Le dí a seguir. Ahora lo entendía todo.

-¡Clara!¡Mira! - Clara vino corriendo y vio lo que estaba pasando, empezamos a reírnos juntas.

-Ahora todo encaja. - Clara cogió el portátil mientras yo iba a abrir, habían tocado a la puerta y como siempre yo era la que tenía que abrir. Me encontré con sus ojos esmeralda, su sonrisa encantadora y sus rizos más cortos que nunca.

- ¿Te has cortado el pelo? - le pregunté - No, espera, la pregunta es otra, ¿qué haces aquí?

- Pasaba a visitar a la novia de mi amigo Niall - se reía Harry entre carcajadas, le hice una seña para que pasara y con él llevaba una maleta de mano.

- Veo que vas a quedarte por un tiempo - iba a cerrar la puerta pero alguien puso el pie.

- ¡No cierres! - Henar gritaba como loca. Hace tres meses que no la veía y nos había avisado que venía de visita, entró y también llevaba una maleta de mano. Mierda, dos visitas agradables el mismo día, esto irá mal. Henar saltó en mis brazos y me abrazó hasta dejarme sin aire - Gor, como te echaba de menos - Gordi era su manera de llamarme, yo la llamaba Gor y al final se le pegó y ahora somos las Gor.

-¡Clara! - grité como loca para que saliera de mi habitación y se encargara de los invitados. Henar vio a Harry mirando la escena, dejó de abrazarme, se quedó alucinada y me acordé del mucho cariño que Henar le tenía a Harry, ella siempre había imaginado el día en el que lo conocería, las cosas que le diría y ahora estaba en blanco, completamente en blanco. - Harry, ella es Henar, Henar él es Harry - hice como si ella no lo conociera y me lo agradeció con la mirada. 

-¡Hostia! - soltó Clara desde el pasillo, se quedó flipada al ver a Henar y a Harry en la misma habitación. Era una imagen rara pero perfecta. Harry rió ante la expresión de Clara, Harry entendía el español pero le costaba muchísimo hablarlo. - ¿Cuánto tiempo vais a pasar aquí?

- ¡Tres días! -contestaron los dos a la vez, Harry en su inglés perfecto y Henar en español. Pensé en como organizaríamos esto, al parecer Henar tendría que dormir con Clara ya que eran amigas de toda la vida y Clara no podría estar en la misma habitación que Harry ya que no hablaba bien el inglés.

- Harry, tu dormirás con ______ ¿ok? - Clara intentaba entenderse con Harry, él se rió y asintió - Henar, tu conmigo, vamos - cogió la maleta de Henar y las dos se fueron a la habitación de Clara. Yo ayudé a Harry a instalarse. Estos días serán muy raros, no sabía que hacer, no podía hacer nada para arreglarlo.

A new life Cap.7

Narrador externo.
En Mullingar los chicos seguían en casa de Niall, esta vez estaban preparando sus maletas ya que al día siguiente tocaba volver cada uno a sus respectivas casas y después de una semana volverían a su gira y a sus conciertos. Liam como siempre pensaba en como podía mejorar como persona pero según sus fans no había manera de mejorar nada en él porque todo él era tierno y dulce. Harry se comía la cabeza en como cambiar, en como dejar de pensar en todo esto, sacar adelante cada idea suya siendo discreto. Louis empaquetaba sus cosas mientras cantaba feliz sin preocupación alguna, debería darle clases a los demás para que aprendieran a ser más llevaderos y no comerse tanto la cabeza. Niall comía en la cocina con el teléfono en la mesa preguntándose ¿la llamo o no la llamo? ¿Dirá que soy un pesado si la llamo? Así pasaban sus últimos diez minutos. Por último Zayn recorría mentalmente su lista de cosas, ¿no se le había olvidado nada? Por lo visto no tenía preocupación alguna o al menos eso quería aparentar.
- ¿Alguno ha visto mis gafas? - gritó Louis con tono alegre y despreocupante.
- ¡No! - gritaron los cuatro cada uno desde su respectivo sitio.
- A saber lo que hice con ellas. Estoy pensando seriamente en ponerme lentillas - Louis hablaba sin parar pero nadie le hacia caso, ni Harry que lo tenía al lado. Louis sabía o al menos creía saber lo que le pasaba a Harry, simplemente era predecible.
En la península un poco más abajo estaba ______ en algún rincón de Barcelona buscando desesperadamente algo que había perdido.Sinceramente ni ella sabía lo que buscaba pero cualquier escusa era valida para volver a llamarlo aunque no encontraba nada como escusa, ¿ valdría llamarlo solo porque quería que me cantara algo ya que estaba melancólica? Pensaba entre millones de cosas que seguían rondando su cabeza.
- ¿Necesitas algo? - preguntó su dulce amiga Clara con mirada alegre y vital al verla tan alterada.
- ¿Qué? No, no - negó con la cabeza y se centró en otras cosas.
- ¿Me vas a contar ya que tal por Mullingar? - preguntó Clara cruzándose de brazos y arqueando las cejas de manera seductora y provocadora.

Narras tú. 
- Voy a vestirme y te cuento - necesitaba buscar algún cuento que se lo creyera pero con ella era difícil. Hoy teníamos que ir de compras así que me puse lo más cómodo que pillé, unas vans rojas, unos pantalones cortos negros y una camiseta de tirantes roja, todo esto lo complemente con un bolso mochila marrón y una gorra de Brooklyn que tenía un significado muy especial para mi. Esa gorra fue el primer regalo que me dio mi hermano al mudarnos a Irlanda, junto a mi hermano hice tantas locuras y tantas tonterías que todos mis recuerdos llegaban a mi cada vez que la llevaba.

Salí de mi habitación y Clara ya se había vestido, llevaba un conjunto monísimo. Parecía que nos habíamos puesto de acuerdo, ella levaba la misma gorra pero en azul y con las letras Warriors, eso nos hizo reír. Llevaba pantalones cortos vaqueros, una camiseta azul de tirantes y unas zapatillas azules, ella odiaba los bolsos por lo que refería dármelo todo a mi o meterlo todo en los bolsillos.

Intercambiamos unas miradas, y en ese instante volvió a hacerme la misma pregunta que antes, lo que me dejó sin palabras. Ella me conocía mejor que nadie y sabía que algo me pasaba, que algo escondía y no podía esconderselo por mucho tiempo, algún día se enteraría y sería peor.

- Estuvo todo genial, tía. Algún día tienes que venirte conmigo, es algo mágico. Lo echaba muchísimo de menos, las casas, los campos, los niños, volví a ver a Miki.... - Clara no me dejó seguir.

- Espera,espera, ¿Miki? - preguntó mientras cerraba la puerta del piso con llave.

- Sí, ¿no te hablé de él? - me negó con la cabeza - Es un chico de siete años y siempre jugaba con él en el parque, me acuerdo de ese día que animó a Liam y le dio un coche para que jugara. Liam siempre que me ve me lo recuerda y dice que desea volver a verlo. - Clara asintió como si no le  importara así que proseguí - También visité a Niall y estos últimos días estuvieron los demás chicos también. Fuimos de picnic e hicimos varías actividades juntos.

- ¿Los demás? ¿Zayn? - me miró intrigada a lo que afirmé - ¡Lo sabía, lo sabía! - gritó tan fuerte que parecía que había descubierto algo impresionante. - No te preocupes, Dani no se enterará de nada.

- Pero fue culpa suya, me colgó en las narices, me hablaba raro y encima me echaba la culpa de un montón de cosas. - me defendí ante todo esto.

- No te alteres, solo trataba de ayudarte. Algún día te enterarás de todo - me dejó dudosa, decidí no preguntar más, no era ni el lugar ni el momento adecuado. 

Narra Dani. 

La llegada de _____ me desconcertó, estaba más rara de lo normal, por un lado la comprendía, había sido muy borde con ella pero los celos me mataban. Pronto dejaría de verla por unos meses, yo me iba de gira y no podría pasar por Barcelona hasta el último concierto dentro de cuatro meses, ella jamás dejará su carrera y sus estudios para pasar una semana conmigo. Me lo había dejado más que claro, pero ¿por qué por Niall daría su vida pero por mi no dejaría ni una semana de su vida? Traté de encontrar cualquier escusa para justificarla pero no la encontré.

- ¿Me estás escuchando? - me gritó Blas ya desesperadísimo.

- Claro - mentí.

- Eso es mentira, ¿que te he dicho? - se cruzó de brazos y David se rió.

- Déjalo Blas, ¿no ves que está en su mundo de problemas? - comentó Álvaro desde el estudio.

Seguía sin enterarme de lo que pasaba pero sabía que Carlos me lo contaría todo hasta que vi su gesto de negación. Tenía un mal día, al menos solo duraba 24 horas y supongo que mañana será un día mejor.

- ¿Cuándo empezamos con la nueva canción? - les pregunté.

- Ya hemos empezado, por eso te decíamos que vinieras - protestó Blas con su tono irónico.

- ¿Han dicho ya cuando empezábamos la gira? - volví a preguntar y todos me fulminaron con a mirada.

- ¿En que mundo vives? - la reacción de Carlos me desconcertó, él era el más dulce y comprensible de todos, no entendía su reacción. - Nos lo dijeron la semana pasada, y sí, en dos días nos vamos - me quedé boquiabierto. Salí corriendo del estudio mientras intentaba buscar su número en la agenda del teléfono, hoy hasta el iPhone tenía un mal día.

- ¿Podemos vernos? - pregunté casi sin voz.

- Estoy en el centro comercial, nos vemos en la cafetería en media hora - me contestó ______ y colgó. Esto me hacía comprender un poco su reacción. ¿Será una buena elección la que estoy haciendo? Sé que a ella también la hará falta, los dos la necesitábamos para despejarnos. ¿Me iba a arrepentir? Sí, lo más probable es que sí. 

Después de media hora llegué a la cafetería, me traía muchos recuerdos bonitos y ahora todo se iba a estropear, aunque no tiene porque, somos adultos, estás cosas solían pasar. Me la encontré sentada en una mesa esperándome, iba guapísima, sonreía como siempre, eso era lo que más iba a echar de menos, su sonrisa y su manera de hacerme feliz. Tenía algo especial, algo que ninguna chica había tenido ni tendrá nunca, tiene algo diferente, no es como todas las demás que siempre van maquilladas hasta el pepe.

- ¿No te vas a sentar? - preguntó sonriente - Ya he pedido lo de siempre,¡capuchino!

- ¿Cómo  te has acordado? - pregunté mientras me sentaba.

- Estas cosas sabes que no se olvidan nunca - el camarero trajo mi capuchino y su café - ¿De qué querías hablar?

- Me voy de gira dentro de dos días - se quedó incrédula, no pestañeaba pero proseguí - Te quiero, y no me cansaré de decirlo - desvió mi mirada, no sabía lo que significa esa mirada dirigida hacia el suelo o a lo mejor lo sabía pero no quería entenderlo - Pero tenemos que darnos un tiempo. Me hace falta para comprender todo lo que está pasando, tu reacción ante esto es diferente, sé lo que significa para ti la distancia y lo necesito, necesito respirar tranquilo y hablar sin saber que te estoy haciendo daño.

Narras tú.

El discurso que me había escupido Dani era más o menos lo que yo había pensado decirle. En realidad tenía toda la razón del mundo.

- No entiendo porque estuvimos haciendo esto, lo nuestro siempre fue amistad y no entiendo como hemos llegado a tanto. Lo que nos hace falta es volver a la normalidad y dejarnos de tonterías, Dani, lo sabes perfectamente - le solté un rollo increíble a lo que el me contestó con mucha naturalidad.

- Lo sé, pero aún así pasar el tiempo contigo es mejor que pasarlo con quien sabe quien y en quien sabe donde - sonrió y me cogió la mano por encima de la mesa. 

- Gracias por ser así, en serio. Eres muy comprensible y la chica que llegue a tenerte será muy afortunada - le sonreí, por fin volvíamos a la normalidad - Primero te perdió Clara por no saber quererte - se enrojeció al oír el nombre de Clara. Definitivamente esto dos también me ocultaban algo - y yo te perdí por no saber apreciarte pero piensa que a la tercera va la vencida.

- ¿Me vas a ayudar con la ropa que tengo que ponerme? - Dani sabía que yo tenía un instinto  y sentido de la moda muy peculiar.

- Primero vamos de compras, segundo vamos a hacer las maletas y tercero nos vamos de fiesta, ¿qué me dices? Bueno, sinceramente no me importa lo que opines, haremos eso sí o sí - se lo afirmé y los dos nos reímos y así empezó nuestra tarde de compras.